Orientatips

Cuida tus emociones, cuida de ti

Cómo cuidar nuestras relaciones: los 5 lenguajes del amor

Uno de los retos a nivel social y emocional a los que nos enfrentamos hoy en día es la expresión de nuestro cariño y afecto hacia otras personas. Hacia nuestra pareja, nuestra familia, nuestros amigos o amigas… Hacia las personas a las que apreciamos. A menudo no encontramos la forma o no le damos la importancia o el lugar para que suceda. Y vamos dejando pasar, o morir, una relación que realmente nos hace bien. Por eso es importante conocer cómo nos gusta expresar y recibir amor y cómo a esa otra persona le gusta expresar y recibir ese amor. Así, ambas partes, podemos adaptarnos, acomodarnos, cuidarnos como necesitamos cada una de nosotras.

Según el Dr. Chapman, hay cinco lenguajes del amor: palabras de afirmación, actos de servicio, recibir obsequios, tiempo de calidad y contacto físico. Los cinco lenguajes del amor describen la forma en que nos sentimos amados y apreciados. Dependiendo de nuestros tipos de personalidad individuales, podemos sentirnos amados de manera diferente a cómo se sienten nuestras parejas, amistades o familiares. Comprender y decodificar estas diferentes formas de mostrar amor ayudará a eliminar las conjeturas sobre las expectativas y necesidades de la persona a la que apreciamos.

Los cinco lenguajes del amor son cinco formas diferentes de expresar y recibir amor. A continuación comparto con vosotros y vosotras qué significa e implica cada uno de ellos:

1) Palabras de afirmación

Esta forma de expresar o recibir amor se basa en la verbalización explícita del aprecio que sentimos o que sienten por nosotros. Desde la expresión genuina de un «te quiero» hasta muestras de gratitud o aprecio por algo que la otra persona haya hecho, dicho o forme parte de ella. Por ejemplo:

  • «Te quiero, eres importante para mí».
  • «Solo quiero que sepas que agradezco esto que estás haciendo por mí».
  • «Estás a mi lado incluso cuando las cosas pueden parecer difíciles, solo quiero que sepas lo agradecido que estoy».
  • «Me siento afortunado de tenerte en mi vida».
  • «Tienes una sonrisa bonita».
  • “Estoy aquí si me necesitas y quiero ayudarte en todo lo que pueda”.
  • “Estás haciendo un gran trabajo. Estoy realmente orgulloso de ti.»
  • «¡Guau! ¡Qué bien te sienta esa camiseta!»

¿Cómo podemos adaptar esta forma de expresar el amor si no tenemos mucha práctica? Un ejercicio sencillo que te propongo es completar estas tres frases: «me siento amada cuando tú…», «aprecio cuando tú…», «estoy orgulloso de ti cuando…».

¡Es una buena forma de empezar!

2) Tiempo de calidad

Este lenguaje se basa en la atención que dedicamos a esa persona a la que apreciamos. O la atención que recibimos por su parte. Es decir, no es solo dedicar tiempo, es dedicarse en ese tiempo. Más que tiempo de calidad, podríamos llamarlo atención de calidad. Es el tiempo que dedicamos o nos dedican donde se escucha activamente, se conversa, se está presente y en conexión real, sin distracciones ni interrupciones, sin estar con la mente ni con los gestos en otro lugar que allí, con esa persona.

Algunos consejos prácticos para hacer esto posible es quedar con antelación. Es decir, saber que ese día o ese tiempo es para nosotros, para esa persona y para nosotros. También apartar teléfonos u otros distractores; o si hemos quedado por videollamada, evitar otros elementos que puedan interrumpir la atención y el tiempo de calidad.

Además de conversar, hay otras actividades que pueden formar parte de este tiempo de calidad, como dar un paseo, hacer un puzle, preparar una comida especial, planificar algo futuro juntos… De lo que se trata, a fin de cuentas, es de estar activamente, conectar con el tiempo y la atención.

3) Actos de servicio

Esta expresión de amor o afecto tiene mucha relación la frase «las acciones hablan más que las palabras». Se basa, por tanto, en hacer cosas que facilitan la vida a la otra persona. Por ejemplo, lavar los platos, cortar el césped, sacar la basura, preparar la comida… Especialmente si la otra persona es quien suele hacerlo. También puede ser limpiar el coche, preparar palomitas o ir a por un refresco mientras se está en el sofá.

Los actos de servicio no son solo aquellos relativos a las tareas del hogar, sino más bien a la cotidianeidad. La preocupación por que la otra persona esté bien, permanecer presente, cuidar a la persona en la medida que se pueda con pequeños gestos que implican tiempo, atención y cariño. Tal vez es enviar un mensaje de ánimo a alguien que está lejos, preguntar cómo le ha ido el día u ofrecerse a ayudar en algo que la otra persona necesita. 

Agradecer estas acciones cotidianas fortalece la relación, incluso si la costumbre nos ha hecho olvidar que estas acciones son, en sí mismas, muestras genuinas también de amor. A este respecto, también es interesante, de vez en cuando, hacer algo espontáneo que se salga de expectativas. Eso hará que la otra persona se sienta valorada, amada y agradecida. O nosotros mismos, somos quien recibimos ese acto de servicio.

4) Regalos

Tener o recibir un regalo, un detalle especial, es otra forma de expresar amor. Cuando alguien nos hace un regalo, ha dedicado tiempo a pensarlo, hacerlo o comprarlo. No es necesario que sea algo grande, a veces basta con la sorpresa de que alguien llegue a casa con nuestro helado favorito.

Del mismo modo, podemos expresar el amor con regalos comprados o hechos manualmente a la otra persona. La persona que aprecia los regalos no necesariamente valora el precio, lo importante suele ser el tiempo y el cariño que lo envuelve. Quizá un colgante, un dibujo, un marca-páginas, una carta… Para quien ha tenido una vida difícil, además, esta forma más tangible de expresar el amor suele ayudar a tener constancia de que esa relación o aprecio es más real.

También caben aquí pequeños actos de servicio en forma material. ¿Cómo? Pues si alguien sabe que hemos tenido una semana muy estresante y nos sorprende con un kit anti estrés. O si sabemos que alguien recuerda con cariño un pastel de su infancia y se lo hacemos o compramos.

5) Contacto físico

Este lenguaje se basa, precisamente, en eso: el contacto físico. Gestos como un abrazo, una caricia, un beso, que nos tomen de la mano apoyar la cabeza en el hombro de esa persona, que acaricien nuestro cabello… Es una forma de expresar cariño y amor también que nos conecta no solo emocionalmente, sino también físicamente.

En una relación de pareja, este contacto físico no es solo mantener relaciones sexuales, es más la intimidad del contacto físico, la conexión, el cariño, la atención de la necesidad física de la otra persona y de la nuestra. De hecho, cuando esto no se da, a menudo las parejas se sienten insatisfechas, poco valoradas o con sentimientos de vacío.

Este lenguaje es tan importante como los demás. Todas las personas necesitamos y podemos expresar el amor utilizando estos lenguajes. Quizá hay uno que nos llena más, al igual que a esa otra persona, pero depende de nuestra historia de vida, de nuestra forma de vivir el amor y de cómo estemos en ese momento. El amor es una necesidad humana, y esa necesidad tiene matices que va evolucionando y desarrollándose con nosotros.

¿Me cuentas en los comentarios de qué formas estás expresando el amor últimamente? ¿Qué expresión de amor necesitas recibir ahora mismo?

Las palabras de afirmación, el tiempo de calidad, los actos de servicio, los regalos y el contacto físico son formas de querer si se hace desde el respeto, el amor y la generosidad. El amor no tiene sentido si no lo practicamos. ¡Cultivémoslo!

María de Oriéntate con María relajada, contenta y apoyando la cabeza sobre la mano

¿Cómo estás?

Soy María

Doctora en psicología y pedagoga terapeuta (col. nº1433 en COPYPCV) especializada en gestión emocional y procesos de superación personal. Compagino mi consulta online con la investigación científica en emociones, ansiedad, bullying y sus secuelas.

Suscríbete a la Newsletter

Recibe en tu correo electrónico orientatips para conocer tus emociones y mejorar tu bienestar. Cuida de tus emociones, cuida de ti

Estas son nuestras redes sociales, en ellas compartimos más recursos sobre bienestar emocional:

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Descubre cómo relajarte en 20 minutos

¿Te sientes estresada, agobiada o angustiada? ¿La incertidumbre te puede? ¿Te cuesta gestionar tus emociones? ¿Tienes dificultades para concentrarte en tus tareas diarias? ¿Tienes un torbellino en la cabeza que parece interminable? 

He preparado esta sesión de relajación guiada porque quiero que relajes tus emociones, cuerpo y pensamientos, y seas más dueña de tu estado emocional, reacciones y decisiones. 

Consentimiento tratamiento datos

You have Successfully Subscribed!

×